En un acto de profundo respeto y condolencia, el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, ha emitido el Decreto 658-23, declarando duelo oficial el día 3 de enero del presente año. La medida se adopta en honor al fallecimiento del distinguido embajador Frank Hans Dannenberg Castellanos, quien dejó un legado imborrable en el ámbito diplomático.
El Decreto presidencial no solo marca el reconocimiento a la destacada trayectoria del embajador Dannenberg Castellanos, sino que también establece protocolos formales para la despedida de este ilustre representante dominicano. Entre las medidas instruidas, se destaca la rendición de honores militares, que serán ejecutados con la solemnidad que merece el servicio del diplomático.
En un gesto simbólico de luto nacional, se dispuso que la bandera nacional ondee a media asta en los recintos militares y edificios públicos en todo el territorio nacional. Esta medida pretende reflejar el pesar y la tristeza que embargan a la nación por la partida de un hombre que contribuyó de manera significativa al fortalecimiento de las relaciones internacionales de la República Dominicana.
La noticia del fallecimiento del embajador Dannenberg Castellanos ha generado un profundo sentimiento de pérdida en la sociedad dominicana, así como en la comunidad internacional. Reconocido por su habilidad diplomática y dedicación al servicio público, el embajador deja un vacío difícil de llenar.
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